Al igual que la popular bandera del arcoiris que representa la lucha gay a nivel mundial, sin olvidar otras muy particulares como el de las personas trans y no binarias, las mujeres y hombres con discapacidad desde hace unos años ya cuentan con la suya.
Son tres franjas horizontales paralelas, cuyos colores, oro, plata y bronce, de manera respectiva, hacen referencia a los amplios segmentos de gente con deficiencias motoras, mentales y sensoriales.
Esta fue creada por el español Eros Recio a inicios de 2017 al considerar que era necesario contar con un símbolo de identificación general, pero viendo la posibilidad de que se conociera y adoptara en otras partes del mundo, gestionó ese mismo año ante la Organización de las Naciones Unidas su aceptación, algo que se consolidó el 3 de diciembre en el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad.
El autor nacido en Valencia es reconocido por ser un bailarín profesional, cuyo talento artístico lo ha llevado a la trascendencia y no solo por tener Síndrome de Down, de ahí que más gente le diera atención a su causa que avanzó en su materialización en 2018 cuando su aportación se presentó durante un evento en Miami, Estados Unidos, con el apoyo de la Bryan’s Art Foundation de Sweetwater y luego se convirtió en el emblema de la organización deportiva olímpica y paralímpica de España, Foment d’Esportistes amb Reptes (FER).
Dado que la bandera apenas tiene unos años de haberse lanzado, todavía no alcanza la popularidad deseada, ni su adopción en muchos países o por decisión de agrupaciones y asociaciones que tienen como eje de acción la discapacidad.
Ahora bien, la enseña tricolor de Eros Recio no es la única, pues en 2020 estudiantes de la ONCE (Organización Nacional de Ciegos Españoles), diseñaron otra pero orientada hacia la inclusión, destacándose una que en forma de mosaico multicolor mostraba cuadros y rectángulos de diversos tamaños y en posiciones diferentes.

